La conquista de Oriente

Según lo previsto, hoy hemos comenzado a conquistar el lejano Oriente. Nuestro primer objetivo estratégico ha sido el buffet libre del restaurante japonés de la esquina (humilde objetivo, pero no por ello menos importante). Para tal hazaña, hemos contado con la inestimable colaboración de Javier, el informático que más Wasabi es capaz de ingerir sin probar gota de agua en todo el Baix Llobregat.

Debo admitir que, en un principio, no hemos sido capaces de afianzar nuestra posición junto a la cinta rodante del japo. A las 13.45, poco después del alba y con fuerte viento de levante, Sergio Moliner, el experto en cocina japonesa (y húngara y siria y judía y de teruel), Javier "HP" Wasabi y un servidor, nos hemos posicionado y hemos iniciado el ataque a los boles de fideos. Sin duda, mi falta de destreza con los palillos ha sido un lastre que nos ha afectado notablemente y nos hemos visto obligados a pedir refuerzos.

este es el momento en que Lorena sucumbe al Sushi

Ha sido entonces cuando, jugando nuestra carta secreta, Jordi "Sushi" Milian y Lorena "esto está asqueroso" Heredia han entrado en acción, poniendo en jaque a las defensas niponas, que han tratado de contrarrestar nuestro ataque con una sensible disminución de las existencias culinarias. Esta sucia estrategia, la utilización de aceites refritos, y la reacción de Lorena ante su primera ración de sushi para principiantes, han hecho que fuésemos expulsados del lugar, previo abono de la cuenta: 15'31€ por cabeza. Todo lo demás, no tiene precio...

han ganado una batalla, pero no ganarán la guerra...